De la zona de El Llanito, Caracas, estado Miranda, miembros de las comunidades reportan que, habiendo pagado la caja CLAP el 5 de noviembre de 2018, a través de una cuenta dada para tal fin por integrantes del Consejo Comunal, ahora no se sabe dónde está el dinero y no ha llegada la caja de alimentos pagada.
Voceros directivos del Consejo Comunal de la zona, mandaron a pagar la caja Clap a través de una cuenta del Banco de Venezuela que pertenece al esposo de una de las conductoras de ese organismo (Nº 01020125080000060545).
El nombre del titular se mantiene en reserva a disposición de los organismos contralores o policiales.
Nadie parece hacerse responsable del paradero de la caja ni de los reales arrebatados a sus vecinos.
Lo más preocupante, nos dicen, es que las instancias superiores y las propias comunidades se muestren impotentes y dejen que las irregularidades ocurran, porque eso termina por acabar con todo un país.
Por consiguiente, hacen un llamado a los responsables de controlar el suministro de los CLAP en el caso de El Llanito, ya que al menos en este caso, no hubo ningún «abastecimiento soberano y seguro», como dice el lema y nombre de la Misión que se encarga de proporcionar a las familias venezolanas los alimentos del CLAP.
La fuente comunitaria de inteligencia social y de ejercicio de la contraloría social que suministra la información, solicitó permanecer en el anonimato, pues asegura que quienes se quejan son víctimas de represalias o de discriminación en la distribución de otros beneficios sociales que sirven de compensación para soportar la hiperinflación y la crisis.